Los creadores de contenido independiente, también conocidos como “Outsiders” están ganando muchísima atención del público deportivo. Los más conocidos son Pablo Carroza, Flavio Azzaro, Hernán “el Tano” Santarsiero, Agustín Muzzupappa, entre otros. La mayoría de estos desarrollan su tarea dentro de YouTube. Por lo cuál, siempre destacan que no tienen un jefe que les de bajadas de línea, no tienen que cumplir horarios, dicen lo que realmente piensan, nadie les impone nada, etc. Por el contrario, siempre se encargan de exponer las cosas que hace mal “el sistema” y se declaran en contra de éste.
Todo muy lindo hasta acá, ahora resulta que hace unas semanas le desmonetizaron sorpresivamente los dos canales que utilizaba como principal fuente de ingreso Carroza. Esto es algo muy atípico y poco probable que ocurra si no existe gente de poder que intervenga para derribarte.
Por su parte, el Tano, es el único periodista de River que asiste ininterrumpidamente a todos los partidos del millonario, pero sin embargo, de parte del club, le ponen impedimentos para trabajar (no lo dejan ir a los entrenamientos de vez en cuando, le niegan la posibilidad de trabajar cómodamente en una cabina y lo mandan a los pupitres de prensa, no lo dejan preguntar en algunas conferencias, entre otros palos en la rueda). Todo esto, porque al no recibir sobres de nadie, describe lo que ve, lo bueno y lo malo, eso no les conviene a los dirigentes de turno.
Otro de los reniega demasiado es “Muzzu”, al que por ejemplo le bajaron muchos videos, lo que significó horas y horas de trabajo tiradas a la basura.
Por último, Azzaro, quién quizás sea el más conocido por haber trabajado en muchos programas de televisión, hasta ahora no ha tenido demasiados problemas para llevar a cabo su labor. Pero desde mí punto de vista, el no hace exactamente el mismo trabajo que los demás, porque observo en base a sus comentarios, que quizás sí reciba algún sobrecito por parte de los poderosos. Tiene muchos “amigos” en el mundo del deporte y consigue entrevistas que para otros sería imposible. O tal vez me equivoco y simplemente dice lo que piensa, pero por lo menos dejenme dudar…
Dicho todo lo anterior, me pregunto… ¿Realmente son Outsiders? ¿En serio trabajan tranquilos sin que nadie los moleste? ¿De verdad de sienten cómodos trabajando de esta manera? ¿No sufren ese ostigamiento constante en el que siempre le están buscando “el pelo al huevo” para tratar de bajarlos y dejarlos sin trabajo? ¿El dinero que ganan les es suficiente? ¿Se justifica exponerse tanto a cambio de esa “lucha contra el sistema”?
Quiero aclarar que yo estoy completamente a favor de estos periodistas, los apoyo completamente. De hecho si hay algo que están ganando con todo esto, es el amor de sus seguidores que crece minuto a minuto. Pero siento que esta lucha no está siendo para nada sencilla, de hecho muchos ya se están cansando de remarla. Ojalá estos chicos jamás den el brazo a torcer, porque los necesitamos para continuar informándonos sobre lo que realmente ocurre en el mundo del fútbol.
Realizada: Ezequiel Valentini